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lunes, 6 de agosto de 2012

De buenos finales (no necesariamente felices)

El otro día mantuve una conversación con un compañero y amigo al que saludo desde mis pequeñas vacaciones. No recuerdo muy bien por dónde fueron los tiros, pero sé que me quedó grabado un detalle; no le gustaban los finales felices. Ya no en una película o un libro, sino en cualquier historia.


Me pareció curioso, ya que casi todos solemos respirar más tranquilos cuando el bueno derrota al malo, cuando el apocalipsis da un respiro a la humanidad o simplemente cuando aquello que lleva toda la historia atormentándonos, desaparece. Solemos empatizar tanto con el protagonista que nos alivia un final feliz. La verdad es que no había pensado seriamente en que hubiera personas que pudieran sentirse decepcionadas con finales como los mencionados. Gente que disfrutaría si finalmente el malo gana la partida. Gente que aplaudiría al terminar un libro en que un tsunami ha hecho desaparecer a la raza humana. Puros antagonistas de todo súper héroe, de toda cena con perdices, de toda vida feliz.

Y es ahí donde uno se pregunta si quizás ese conjunto de personas no es tan reducido como piensa. Si debe haber más de los que puede imaginar. Si al final va a resultar que lo de los finales felices es una patraña que se ha heredado irremediablemente porque no se han sabido hacer grandes historias con grandes finales. El ejemplo lo tenemos cercano en películas como Titanic, Gladiator o 300. Ninguna de ellas tiene un final 'feliz', pero tienen preciosos finales que, además de ser justos con el desarrollo de la trama, probablemente no se verían modificados por ninguno de sus fans (obviaré de aquí al grupito de adolescentes pro-Caprio).

Seguiré pensando sobre esto... :)

3 comentarios:

  1. "¿Y tiene un final Feliz?"
    "Como solo es posible en el cine"
    V de Vendetta.

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  2. Como bien lo mencionas a mmi me ha pasado en varias ocasiones de pronto sentir que el principal no tiene que triunfar es justificable. Aunque a veces creoq ue la historia lo amerita. Es como la otra vez vi una película de KAte Hudson donde ella muere y no me gustó, por que ella siempre en sus películas es feliz, se queda con el novio, se divierte y demás. Pero si hubiera visto no sé a una Kate W. Pues no me afectaría tanto, creo que aplaudiría la obra. Ya que si me la puedo imaginar en esa circunstancias. De igual forma sería ver una comedia romantica que terminara en Drama :S!! osea obvio terminaría por no gustarme. Pero un 300 lo ameritaba por ejemplo. Muy buena entrada. A mi me ha pasado por la cabeza, de hecho una vez eso lo platicaba con un "ex amigo". Saludos.

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  3. Gracias por vuestros comentarios, amigos.

    En cuanto a lo que comentas, R, eso es un tema aparte, pues en el cine hemos de añadir lo delicado de la elección de los actores. Estos despiertan variados sentimientos en el público (no creo que Winslet agrade a muchos). Es un handicap del cine que no existe en la literatura :-)

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